Ante la llegada inminente de la
temporada de lluvias, la dirección municipal de Protección Civil en
coordinación con el Sistema Estatal de Protección Civil emite una serie
de indicaciones a la población, con la finalidad de reducir los riesgos
de desastres, sobre todo en aquellas comunidades donde históricamente se
tienen registros de afectaciones.
La dependencia municipal recordó que uno
de los grandes problemas que sufren las familias que habitan en
comunidades de la parte baja, son los encharcamientos, por ello
recomiendan que de manera anticipada y personal se realice una limpieza
exhaustiva de las coladeras y desagües, para evitar la acumulación de
basura en los tubos y drenajes, y con ello evitar que se provoquen los
taponamientos.
“Pero es también de suma importancia que
los ciudadanos ya no actúen de manera irresponsable, porque se ha
detectado que durante las presipitaciones pluviales arrojan grandes
cantidades de basura que queda atrapada en las rejillas de los drenes
pluviales, lo cual impide que el agua se vaya a la tubería y provoque
afectaciones”.
Otra de las recomendaciones para la
población es mantenerse atento a los medios de comunicación y al mapa de
alerta por lluvias que emite diariamente el Servicio Meteorológico
Nacional, a fin de conocer las condiciones climatológicas actuales y
disminuir los riesgos de accidentes.
“En caso de transitar por carretera o al
interior de la ciudad, modere su velocidad ya que aumentan los riesgos
de sufrir alguna clase de accidente, derrumbes o deslaves, es de vital
importancia que la población se mantenga alerta al incremento súbito en
los niveles de ríos y arroyos, en el caso de detectarlo deberá
reportarlo inmediatamente a los números de emergencia del 066”.
Por otra parte se sugiere una revisión
de las condiciones de los techos de las viviendas, ya que algunos
materiales como lamina, cartón o palma son susceptibles de desprenderse
por la acción de los vientos y es necesario reforzarlos.
Finalmente, la dirección de Protección
Civil municipal dio a conocer que mediante la capacitación a las
familias se ha conformado los planes familiares de Protección Civil, en
el que cada uno de los miembros de la familia se encarga del rol que le
corresponda como la ubicación del refugio temporal más cercano, que se
tenga a la mano alimentos y agua embotellada así como los documentos
personales, que se realicen simulacros de evacuación y se designen
tareas, para reducir los riesgos por lluvias.
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