Padres de familia de alumnos de reciente ingreso a la Escuela Primaria
Federal “Camilo Pintado” de esta capital, denunciaron la mala actitud
del director de ese centro educativo, quien en contubernio con
integrantes de la Mesa Directiva de Padres de Familia, están comerciando
con las sillas para los alumnos de los primeros grados, y tienen de
plazo hasta este fin de mes para pagar, toda vez que de lo contrario,
los pequeños podrían recibir sus clases de pie.
Los padres inconformes, cuyas identidades nos reservamos por obvias razones, denunciaron que desde antes de finalizar el pasado ciclo escolar, el director de la escuela primaria, ubicada sobre la Calzada “Ignacio Zaragoza” (antiguo Rastro), de nombre Oscar Rolando Oliva Molina, les informó a los padres que inscribieron a sus hijos para los cuatro primeros grados, y que en total suman casi 200, que al inicio del nuevo ciclo escolar deberían pagar $500.00 (quinientos pesos) por cada silla destinada a sus pequeños.
Detallaron que fueron advertidos que de no pagar la cuota especificada, los pequeños no tendrían una silla para recibir sus clases, además de que al acudir con los “representantes” de la Mesa Directiva de Padres de Familia, de nombres Adriana, Guillermina y Olga, sin proporcionar sus apellidos, recibieron la misma respuesta, a pesar de que las sillas llevan los logotipos del Gobierno del Estado que preside Manuel Velasco Coello.
Por lo anterior, deducen que las sillas fueron donadas por el Jefe del Ejecutivo, a través de la Secretaría de Educación, y que al estar cobrando por la adquisición de cada una de ellas, tanto el director de la escuela como los representantes de la Mesa Directiva de Padres de Familia, estarían incurriendo en un delito al comerciar con algo que por obligatoriedad, las autoridades educativas deben proporcionar a los alumnos de todos los niveles educativos en escuelas públicas.
Ante ello, hacen un llamado urgente al propio Gobernador del Estado, Manuel Velasco Coello y al titular de la Secretaría de Educación, Ricardo Aguilar Gordillo, para que realicen una exhaustiva investigación y se castigue conforme a derecho corresponda a quien o quienes resulten responsables de estar lucrando con la educación de los pequeños.
Finalmente, señalaron que esta anomalía se está dando en los cuatro grupos de primer grado que esta semana comenzaron a recibir clases y que, en total, suman alrededor de 180 alumnos, además de que desconocen cuál será el destino que se le dé al dinero que están pagando por cada silla y que podría alcanzar casi 100 mil pesos.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario