Padres de familia dieron a conocer su
molestia por la venta de comida chatarra afuera de las escuelas,
mientras profesores de nivel básico en la capital chiapaneca señalaron a
los padres de familia como responsables directos de la nutrición de los
niños.
“¿Afuera sí pueden vender? porque
casualmente afuera venden todo tipo de chatarras, y los niños no se
compran nada adentro pero nada más salen y se dan gusto”, aseguró la
madre de familia, Rosaba Jazmín Guerrero.
Argumentaron que lo mejor es enseñarlos a comer sano y natural, explicarles porque algunos alimentos son dañinos para su cuerpo.
Al respecto la profesora Carmen Vilchis
Ríos dijo: “Creo que a algunos se les está metiendo el extremismo y
buscan culpables donde sólo los padres tienen responsabilidad por la
educación sedentaria. Una cosa es que un niño se alimente de pura
chatarra y otra que sus padres se responsabilicen, lo manden desayunado y
le pongan un alimento ligero y ya si gusta que se compre unas frituras o
una paleta, que si el niño tiene buenos hábitos no debería dañarlo. En
mis tiempos un niño podía tragarse una bolsa de chicharrones y no se
ponía obeso porque de inmediato se iba a correr o a jugar. Pero ahora es
más fácil o cómodo tener al niño sentado en la casa embobado con la
televisión, computadora o videojuegos, que llevarlo al parque o meterlo a
algún deporte”.
El esfuerzo que se ha realizado por
eliminar la comida chatarra dentro de las escuelas será en vano si
cuando los niños salen de clases los padres les compran cuanta golosina
venden, dijo la docente.
El objetivo de cuidar la alimentación de
los infantes en los centros escolares radica en que crezcan sanos.
Según la nutrióloga Inés López Medina, los factores causantes de la
obesidad son la nutrición inadecuada y falta de actividad física.
“Lo que puedo recomendar es que al niño
hay que ponerlo a la calle, alejarlo del televisor, y que los padres le
organicen las horas que tiene que estar frente al demonio del play
station o Xbox, y que se vaya a jugar futbol”.
Desde que el niño nace, dijo, hay que
empezar a preocuparse, en especial por ese problema, pero no sólo es la
obesidad, es la presión arterial elevada y es el tipo de nutrición
inadecuada. “Los padres deben enseñar a los hijos que pasa en su
organismo cuando comen cosas que no son naturales, o con químicos y
colorantes. Los niños aprenden rápido porque son muy inteligentes y
comprenderán a la perfección. Pero si mamá toma refrescos y donitas,
entonces el niño se confundirá y no comprenderá por qué a él se lo
prohíben y le dicen que hace daño; por ello es tan importante enseñar
con el ejemplo y tener una familia comiendo saludable”.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario