Trabajadores del Centro de Desarrollo de la
Medicina Maya (Cedemm) de San Cristóbal de Las Casas, donde se encuentra
el Museo Maya, cuyo espacio fue invadido, retuvieron el 31 de diciembre
a uno de los invasores, para posteriormente entregarlo a las
autoridades correspondientes para ser procesado.
Fue cerca de las 12:50 horas cuando una persona que dijo llamarse Juan
Eduardo Sántiz, originario del municipio de Pantelhó, se encontraba
rondando por el edificio del Cedemm, al ver la forma sospechosa en que
actuaba, aproximadamente 50 personas lo retuvieron.
Durante el lapso en el que estuvo retenido, Eduardo Sántiz confesó que el líder de esta nueva invasión es Mariano Jiménez Gómez, quien también es señalado de invadir terrenos propiedad de la Comisión Nacional de los Pueblos Indígenas (CDI), antes Instituto Nacional Indigenista (INI) de esta ciudad.
Luego de que solicitaron la presencia de Mariano Díaz Ochoa, subsecretario de Gobierno de la región Tsetal Tsotsil, lo entregaron a las autoridades de la Fiscalía de Justicia, para que fuera encarcelado posteriormente.
La reciente invasión de los terrenos del Cedemm, ocurrió el 28 de diciembre del 2014, cuando un grupo de personas que alegan no tener vivienda ingresaron a dicha área brincando la barda, luego hicieron galeras en un predio de más de una hectárea, situado en la parte norte de la ciudad.
Diversas organizaciones sociales, ciudadanos que no pertenecen a ninguna agrupación en esta ciudad, han condenado esta nueva invasión y han exigido a las autoridades competentes que no se permitan estos hechos.
“Este día empezamos a realizar nuestra denuncia como pueblos unidos en contra de los grupos delictivos que se han posesionados en diferentes partes de nuestra bellísima ciudad colonial de San Cristóbal de Las Casas, que vienen haciendo atropellos y violentando a los derechos humanos de los pobladores y a la vez violando nuestro Carta Magna”, refiere un comunicado signado por el pueblo organizado.
“Sabemos antemano que ocupar un espacio o tomar un predio que es propiedad federal o privada, es un grave delito”, mencionan.
“Es triste y lamentable que los líderes usan a la gente para invadir primero, luego empiezan a lotear el terreno y los venden a un costo muy elevado. En caso del terreno del CDI el dirigente e invasor principal Mariano, ex presidente municipal de Pantelhó, vende los lotes de cien a 150 mil (cada lote mide ocho por 15 metros); a la persona quien adquiere el terreno lo condicionan y lo amenazan que no le diga a nadie el costo del lote y lo instruyen que diga que solo pagó una mínima cantidad como cooperación, y si en caso que el comprador hace comentario que le costó tal cantidad, si llega a enterarse el dirigente es expulsado y no le devuelven su dinero, así amenazan los dirigentes”, denuncian.
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