Por cuestiones de venganza y por ser considerados como un obstáculo para las malas prácticas que pretenden establecer directivos dentro de la sub-gerencia Diconsa, de la capital del estado, seis trabajadores denunciaron haber sido víctimas de despido injustificado.
De acuerdo a las versiones de los afectados, desde el pasado 15 de octubre fueron notificados a través del área de recursos humanos sobre la decisión de separarlos del cargo pese a pertenecer al personal de base y ser sindicalizados; la versión que les dieron es que existiría una reestructuración dentro de esa empresa adherida a la Secretaría de Desarrollo Social.
Las versiones no resultaron ciertas, dijeron, porque las plazas que supuestamente suprimirían, fueron ocupadas por personas originarias del estado de Tabasco y afines a Carlos Miguel Ricárdez Mendoza, subgerente de la empresa social, encargada de proveer insumos de la canasta básica a las tiendas Diconsa en la entidad, dentro del programa Nacional Sin Hambre.
“Lo que querían es sacarnos de nuestros trabajos porque nos dábamos cuenta y nos oponíamos a todas las irregularidades que ellos pretendían sobre todo en materia de almacenes, obras públicas y mantenimiento de la flotilla de automóviles con los que cuenta la empresa. Éramos un estorbo para ellos, al despedirnos podrán hacer sus negocios a sus anchas”, denunció Ramón Jiménez Bañuelos, uno de los trabajadores despedidos.
Lamentaron que la delegada seccional del sindicato de Diconsa, Alejandra Mendoza Cruz, no les haya respaldado en sus derechos que tiene como trabajadores ante tal atropello, pues en ningún momento ha existido motivo alguno para que fueran despedidos injustificadamente, consideran que existió un acuerdo previo, entre la delegada seccional y el subgerente, para prescindirles del contrato laboral.
“Se supone que si iba a ver una reestructuración en la subgerencia, hubiesen desaparecido las áreas donde estábamos de directivos o en su caso despedido a personas de menor antigüedad laboral, pero nada de eso paso y nuestra representante seccional del sindicato no metió las manos por defendernos.”
Se tenía conocimiento, dijo, de que los ajustes serían para la parte administrativa, pero no en la parte operativa donde los afectados pertenecían, derivado de ello entablaron una demanda laboral por despido injustificado en la Junta del Conciliación y Arbitraje; además presentaron su querella ante la Comisión Nacional de Derechos Humanos.
El resto de los despedidos son Luis Antonio Zenteno Gutiérrez, Julio César Monterrosa Díaz, Hernán Cancino Guilmar, Eloy González González y Raúl Verrún Rodríguez quienes han presentado pruebas de las irregularidades que existen en dicha sub-gerencia ante la Secretaría de la Función Pública. Solicitaron una investigación profunda sobre las irregularidades que se han presentado dentro de la subgerencia de Diconsa.
Entre las irregularidades que denunciaron se encuentra la licitación de una obra, por más de 24 millones de pesos para la construcción del almacén ubicado en la capital del estado, el cual nunca se concluyó; para esta obra se benefició curiosamente a una empresa de Tabasco, de nombre Constructora Elvic, S.A. de CV., la cual se ubicaba muy por encima de otras empresas en cuanto a cotizaciones. “Aún así lo beneficiaron, porque había empresas que habían cotizado en menos cantidad la construcción del almacén.
La empresa dejó inconclusa la obra y en condiciones de riesgos, pues al poco tiempo de retirarse, la barda perimetral que había construido se vino abajo por el reblandecimiento de la tierra y para colmo, dijeron, la que construyeron de nuevo, está sufriendo la misma situación pues no se hizo un estudio previo de la mecánica del suelo.
Además de dicha irregularidad de obra pública, añadieron, en Diconsa también se dan los famosos moches pero sólo que en especies; es decir, que para beneficiar a ciertos proveedores se les pide una cantidad de mercancía extra sin cargo a la factura; dicha mercancía no es ingresada al almacén para ser distribuida a las tiendas Diconsa y se desconoce el lugar a donde llegan a dar. Vía Noticias Voz e Imagen de Chiapas
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